Por Mati Berelejis
Jugar mirar y oír. Interactuar.
Un nuevo arte no tan nuevo ya.
Historias buenas y excelentes.
Inmersividad a otro nivel.
Ritmos, tiros, puzzles, equipos, elecciones.
Mundos cerrados o abiertos. Cada vez más grandes.
Creaciones aleatorias o calculadas en cada detalle de su forma.
Mecánicas complejizadas e incorporadas a partir de experiencias anteriores. WASD moverse, E interactuar, Shift correr, Barra espaciadora saltar, R recargar. Controles ya automáticos.
El lenguaje videojueguil (SE BUSCA un nombre menos choto) está en una etapa de constante evolución que aún no tiene pinta de desacelerar.
Dificultades variadas para diferentes niveles de conocimiento y práctica en ese lenguaje. Historias personalizadas a partir del modo de juego de cada unx. Finales alternativos. Muchos. Eliges tu propia aventura.
No es sólo tiros y nada más. Tocar lo más profundo es totalmente posible. Negarlo es mentir.
De chico era Counter, Age of Empires II, GTA, Tarzan, Toy Story 2, Sims, Harry Potter. Hoy ando en The Witness, que es puro puzzle y exploración, y tiene un fragmento de Nostalghia de Tarkovski dentro suyo.
Hay tipos de jugadores, exploraciones según los gustos. Jugando te volves un tipo de jugadorx. Unx se encuentra con zonas de comfort dentro éste arte. Géneros y subgéneros. Hay bullet hells, first person shooters, point and click, mmorpg, metroidvania. Muchisisimos más. Hay juegos de terror, de comedia, de acción, ciencia ficción, dramaticos, románticos.
El audiovisual le cuesta más innovarse y romperse hoy en día. La idea de que todo ya está hecho en él la tiene mucho más asentada. El videojueguil aun no enfrenta esa barrera. Le falta muchisimo para hacerlo.
El jugar como un arte. Entrenar alguna habilidad pero entreteniendose, divirtiéndose, metiendose.
*las imágenes son de jueguillos que me copan mucho
elmatedebates.wordpress.com 